De l’Informe de Francesca Albanese, Relatora Especial de les Nacions Unides per als territoris palestins ocupats sobre les empreses involucrades en el projecte colonial israelí. Consell de Drets Humans. 59è període de sessions. 16 de juny a 11 de juliol de 2025.
“Resumen:
En el presente informe, la Relatora Especial sobre la situación de los derechos humanos en los territorios palestinos ocupados desde 1967 investiga la maquinaria empresarial que sostiene el proyecto colonial israelí de desplazamiento y sustitución de los palestinos en los territorios ocupados. Mientras los dirigentes políticos y los gobiernos eluden sus obligaciones, demasiadas empresas se han beneficiado de la economía israelí de ocupación ilegal, apartheid y ahora genocidio. La complicidad expuesta por el informe es sólo la punta del iceberg; no se pondrá fin a ella sin exigir responsabilidades al sector privado, incluidos sus ejecutivos. El derecho internacional reconoce diversos grados de responsabilidad, cada uno de los cuales exige un escrutinio y una rendición de cuentas, especialmente en este caso, en el que están en juego la autodeterminación y la propia existencia de un pueblo. Este es un paso necesario para poner fin al genocidio y desmantelar el sistema mundial que lo ha permitido.”
Uns fragments esclaridors:
“18. En los Territorios Palestinos Ocupados, sobre la base de décadas de violaciones de los derechos humanos y crímenes documentados, los recientes acontecimientos judiciales no dejan lugar a dudas de que el compromiso empresarial con cualquier componente de la ocupación está relacionado con violaciones de las normas de ius cogens y crímenes internacionales (véase el anexo). Citando la segregación racial y el apartheid, las violaciones del derecho a la autodeterminación y la prohibición del uso de la fuerza, la Corte Internacional de Justicia afirmó inequívocamente la ilegalidad de la presencia de Israel, incluida su presencia militar, sus colonias y su infraestructura y control de los recursos. Además, las atrocidades cometidas desde octubre de 2023 desencadenaron procedimientos por genocidio ante la Corte Internacional de Justicia, y por crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad ante la Corte Penal Internacional. La Corte Internacional de Justicia ha ordenado a Israel que deje de crear condiciones que destruyan vidas y recientemente ha recordado a los Estados sus obligaciones internacionales de evitar la transferencia de armas que puedan utilizarse para violar convenios internacionales.
19. Estas decisiones imponen a las empresas la responsabilidad prima facie de no comprometerse y/o de retirarse total e incondicionalmente de cualquier trato asociado, y de garantizar que cualquier compromiso con los palestinos permita su autodeterminación.
20. Cuando las entidades corporativas continúan sus actividades y relaciones con Israel –con su economía, ejército y sectores público y privado conectados con el territorio palestino ocupado– se puede considerar que han contribuido a sabiendas a:
(a) Violación del derecho palestino a la autodeterminación;
(b) Anexión de territorio palestino, mantenimiento de una ocupación ilegal y, por tanto, al crimen de agresión y las violaciones de derechos humanos asociadas;
(c) Crímenes de apartheid y genocidio;
(d) Otros crímenes y violaciones auxiliares.
21. En diversas jurisdicciones puede invocarse tanto la legislación penal como la civil para exigir responsabilidades a las empresas o a sus directivos por violaciones de los derechos humanos y/o crímenes de derecho internacional.
IV. De la economía de la ocupación colonial a la economía del genocidio
22. En Palestina, históricamente, las empresas han impulsado y permitido el proceso de desplazamiento y sustitución de la población árabe, fundamental para la lógica de la supresión colonial. El Fondo Nacional Judío, una entidad corporativa de compra de tierras fundada en 1901, ayudó a planificar y llevar a cabo la eliminación gradual de los palestinos árabes, que se intensificó con la Nakba y ha continuado desde entonces.
23. Con la ayuda cada vez mayor de entidades empresariales, Israel ha perseguido el despojo y el desplazamiento de palestinos…“.
El trobareu sencer aquí. Malgrat la indignació que provoca, paga la pena llegir-lo.